
¿Cómo afrontar un Trastorno de la Conducta Alimentaria en Navidad?
La Navidad es una época que rompe con muchas de las rutinas que tenemos durante el año: vacaciones, medias jornadas, más tiempo libre, comidas copiosas y eventos sociales, etc. Por este motivo, estas fiestas pueden convertirse en un periodo especialmente complicado para las personas que sufren un Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA) y sus familias.
La persona que lo sufre suele sentir una gran ansiedad ante situaciones que involucran comida, ya sea por miedo a poder aumentar de peso o por el riesgo de descontrolarse con la alimentación. Por tanto, esta ansiedad puede aumentar durante las celebraciones de Navidad.
El apoyo del núcleo familiar resulta clave en el tratamiento para la recuperación de la persona que sufre un trastorno de la conducta alimentaria y en época navideña se vuelve aún más necesario. Desde MASSVITAL queremos ofrecer una serie de pautas que pueden ayudar tanto a las personas que padecen algún TCA como a sus familiares, y así vivir la Navidad de la mejor manera posible:
- Acompañar desde la comprensión y el cariño a estas personas, sin juzgarlas ni obligarlas a nada. Recuerda que nadie quiere sentirse mal, y más aún en contextos donde “lo normal” es disfrutar. Actuar con empatía hacia la persona afectada y ofrecerle la oportunidad de expresarse con libertad puede quitarle un gran peso de encima.
- No presionar con los alimentos: Es momento de muchas comidas familiares que suelen ser especialmente copiosas y nuestras despensas suelen llenarse de productos como polvorones, turrones, bombones, etc. Sin embargo, lo que para alguien que no tiene TCA puede ser un gusto, para la persona que lo padece puede convertirse en una tortura. Por tanto, no insistirle.
- No centrarse en la comida: Sabemos que estas fiestas implican muchas reuniones en torno a la comida. Sin embargo, la alimentación no tiene por qué ser el eje central en estos eventos. Podemos celebrarlas a través de múltiples actividades en familia: un paseo relajado, juegos de mesa, bailar, etc.
- Servir los alimentos en un plato y sentados en la mesa: Durante las comidas de Navidad es habitual poner platos para compartir, sin embargo, una persona con TCA puede tener muchas dificultades para estructurar e identificar cual es la cantidad de comida adecuada. Es más recomendable realizar las comidas en un lugar donde todos los comensales estén sentados y alrededor de una mesa, evitando comidas de pie, de coctel o similares. Una manera de disminuir la sensación de malestar y de falta de control sería sirviéndole en el plato la cantidad normal y ajustar el menú navideño a la estructura de un entrante, plato principal y postre.
- No exponer los dulces navideños que se sirven en la sobremesa más allá de un tiempo prudencial: Este tipo de alimentos habitualmente “prohibidos” suele generar un fuerte deseo y favorecer los atracones de comida. Prepararlos exclusivamente para su consumo inmediato después de la comida y luego retirarlos puede ser de gran ayuda para que estas personas se autocontrolen y disminuya su ansiedad.
- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas, por su nulo interés nutricional y sobretodo en los casos que toman medicación ya que puede interferir y provocar efectos adversos.
Recordad que se trata de recomendaciones generales: cada persona presenta un contexto particular y una manifestación de síntomas determinados, que también dependerán del tipo de TAC que presente (anorexia, bulimia, trastorno por atracón, ortorexia o vigorexia). No obstante, esperamos que estas pautas ayuden a normalizar la situación de malestar que viven tanto las personas con TCA como sus familiares, sin presiones ni tabúes. ¡Deseamos que podáis disfrutar con total libertad de las fiestas!