Todos nosotros vivimos en el mismo Planeta, en una Realidad objetiva, pero cada uno de nosotros experimenta y siente esa misma Realidad de una forma diferente. Los MODELOS DE REALIDAD datan del conocimiento personal que cada uno de nosotros tenemos sobre los demás, sobre el futuro, sobre nosotros mismos y sobre el mundo.

Este conocimiento se va adquiriendo desde el momento en que nacemos: es una historia de aprendizajes que va sucediendo a medida que vamos viviendo. Es el resultado de vivir, de nuestros errores y éxitos ocurridos en las distintas situaciones a las que nos vamos enfrentando.

Es decir: Nuestros Modelos de la realidad van a determinar los comportamientos que adoptaremos a lo largo de nuestra vida para relacionarnos con el mundo que nos rodea, es decir en lo que hacemos. Son como una especie de “guía” o mapa que nos orienta y que a medida que pasa el tiempo, se va completando y haciendo más amplio.

Tipos de realidad

Podemos diferenciar dos tipos de modelos de realidad:

Los modelos simples: “Lo que es, es lo que es y no puede ser otra cosa”. Está relacionado con la esencia, la naturaleza. Realidad objetiva, sujeta a ciencia: Un perro no es un gato por sus características biológicas, fisiológicas y descriptivas.

Los modelos complejos: Hipótesis y Conclusiones a las que se llegan por experiencias previas. Se hace una recopilación de pruebas suficientes- estas deben tener algún sentido para nosotros o que provengan de fuentes “fiables”-, y se analiza dicha información para comprobar las pruebas a favor y en contra que tienen cada una de las hipótesis, hasta que se llega a la conclusión “más acertada”.

Ejemplo: “Mi novio me engaña” (hipótesis). ¿En qué me baso?: Está mucho tiempo fuera, le suena mucho el teléfono, se va a otra habitación a contestar mensajes. Eso unido a una historia de aprendizajes donde mi padre hacía eso y resultó tener una amante. Conclusión: Mi novio tiene un amante al comportarse así-al igual que mi padre-.

No cabe duda que los Modelos de Realidad es un Recurso magnífico que ha desarrollado nuestra mente para poder simplificar este mundo tan complejo con el que nos toca interactuar, el problema de todo esto es que a veces no ocurren las cosas tal y como creemos. Imaginemos que este chico le estaba preparando una fiesta sorpresa a su pareja…las conductas anteriormente mencionadas también encajan en este hecho, solo que al protagonista de esta historia nunca ha tenido la experiencia de una fiesta sorpresa. Por tanto no está en su Modelo de Realidad.

A veces también puede ocurrir que una fuente por muy fiable que sea, no es infalible es decir, también las personas a las que damos credibilidad se equivocan. Y sucede también al contrario: una persona de “dudosa reputación” puede estar en lo cierto. Todo esto choca fuertemente contra nosotros porque nos ocasiona inestabilidad e incertidumbre, surgiendo así un abanico de preguntas del tipo: “¿Entonces qué debo hacer? ¿Qué es lo correcto?”…Y nos desestabilizamos. Hay hechos que nos cuesta mucho asimilar o que no estamos preparados para ello.

Como Conclusión…

Siempre hablo de que la Flexibilidad psicológica, la Apertura Mental es signo de SALUD PSICOLÓGICA.

Es cierto que los modelos nos ayudan y ahorran mucho tiempo, pero hay veces que tenemos que desafiarlos. Existen ciertas situaciones donde nos encontramos mal, sentimos que algo nos hace daño o que sufrimos de alguna manera. Es entonces donde habría que contemplar la posibilidad de que las creencias por las cuales interpretamos esa situación sean erróneas.

¿Qué hacer? Experimenta, desafía, pregunta, investiga, prueba. Posiblemente te equivoques y tengas que volver a intentarlo. No es tarea fácil abrirse a LO DESCONOCIDO, pero cambiar el modelo nos permite sentirnos mejor y desarrollar estrategias eficaces para conseguir nuestros objetivos de cara a ese nuevo contexto o “Nueva Realidad”.